El Real Madrid ha perdido dos futbolistas importantes en puestos fundamentales como Khedira y Arbeloa y ya han comenzado las cábalas sobre quien debe sustituirles.
Todo indicaba, tras la lesión del alemán, que su puesto lo ocuparía Lass haciendo el doble pivote con el indiscutible Xabi Alonso. Pero la inoportuna expulsión de Álvaro Arbeloa en los minutos finales del partido ante el Málaga con todo decidido ha hecho que se enciendan las alarmas en el Real Madrid. Mourinho no está muy por la labor de deshacer la pareja Ramos-Pepe del centro de la zaga dado que considera que es indiscutible ya que permite presionar más arriba y no sufrir tanto con los balones a la espalda y que, evidentemente, están dando un gran rendimiento.
En caso de no tocar esta pareja, una de las opciones sería la de meter a Lass en el lateral y a Coentrao, la principal apuesta por el mercado de fichajes el pasado verano, en el centro del campo. No parece que el técnico portugués esté por la labor de volver a poner al lateral luso en la derecha como en liga, por lo que no barajamos esta opción. La otra, que parece la menos factible y no por ello menos lógica de todas es la de poner a Granero junto a Xabi y retrasar a Lass al lateral.
Si definitivamente Mourinho decide deshacer la pareja Ramos-Pepe, el central luso podría formar junto a Alonso en la medular y poner a Varane o Albiol en el centro de la zaga, o bien desplazar a Sergio Ramos al lateral y mantener a Lass en el doble pivote. Mourinho baraja todas estas variantes y parece que todas pueden tener un buen resultado. El técnico blanco está obligado a dar la cara ante el FC Barcelona y guiar a su equipo a ser, por segundo año consecutivo, la principal apuesta por la Copa del Rey. Sobre el papel es un experto en eliminatorias. En quince días lo sabremos.
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